La Guardia Civil ha desmantelado una banda que, durante las madrugadas, llevó a cabo 17 robos en diversos establecimientos de Madrid y Toledo, logrando un botín de 10.000 euros. Las víctimas de estos asaltos incluyeron farmacias, bares, clínicas dentales y tiendas de alimentación.
La investigación se puso en marcha tras varias denuncias presentadas por los afectados, lo que permitió a los agentes conectar los robos perpetrados en el sur de Madrid (en localidades como Arganda del Rey, Pinto y Villaconejos) y en el norte de Toledo (Seseña, Esquivias y Añover de Tajo). Los delincuentes empleaban un método bastante peculiar: utilizaban alcantarillas para romper los cristales de los locales y luego forzar los cierres metálicos.
El primer robo que desencadenó la investigación tuvo lugar en un bar de Seseña, donde los ladrones rompieron una ventana con una alcantarilla, accedieron al interior y forzaron una máquina tragaperras, de la que se llevaron todo el dinero en efectivo. A lo largo de sus incursiones, consiguieron acumular un total de 10.000 euros en efectivo.
La Guardia Civil ha detenido a siete individuos, residentes en Aranjuez y Valdemoro (Madrid), a quienes se les imputa la comisión de varios delitos de robo con fuerza, además de hurtos de gasoil, ya que también se marchaban sin pagar el combustible en las gasolineras antes de realizar los asaltos nocturnos.